Cada que empieza un año nuevo es momento de iniciar. Es un origen. Metas, propósitos; por supuesto, alcanzables. A mi modo, a mi sentir. Espero que de ahora en adelante siga fluyendo todo como hasta ahora. Nuevos caminos por recorrer. Hoy día mucho más rápidos con tanta tecnología en la palma de nuestra mano. En el celular. En miles y miles de kilobytes que recorren el universo de 0 y 1.
En mi camino se van encendiendo luces. Luces bellas de gente que voy conociendo. Al paso del tiempo me doy cuenta de lo valioso que es tener amigos en quien confiar.
Este 2010 está dedicado a esas personas nuevas que forman parte de mi vida.
Ya soy inquebrantable.
¿Y tú, me acompañas?
